Este tipo de jeringa es especialmente útil en situaciones donde se requiere una precisión exacta en la dosificación, como en pruebas de tuberculina o administración de medicamentos en bebés y niños pequeños
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La jeringa NIPRO de 1 ml, tipo tuberculina, sin aguja, es un dispositivo médico diseñado para la administración precisa de pequeñas dosis de líquidos, como medicamentos o vacunas, especialmente en el contexto de pruebas de tuberculina y otras aplicaciones médicas específicas.
Características:
Capacidad: Tiene una capacidad de 1 ml, lo que la hace ideal para administrar dosis precisas de medicamentos en pequeños volúmenes.
Tipo tuberculina: Este tipo de jeringa está diseñada específicamente para ser utilizada en pruebas de tuberculina y otras aplicaciones médicas similares que requieran una dosificación precisa y controlada.
Sin aguja: Viene sin aguja, lo que permite que el profesional de la salud seleccione la aguja adecuada para el procedimiento médico específico.
Presentación: Se presenta en un paquete de 100 unidades, lo que proporciona un suministro conveniente para entornos clínicos y médicos.
Beneficios:
Precisión: Permite la administración precisa de medicamentos en dosis pequeñas, garantizando la seguridad y eficacia del tratamiento.
Versatilidad: Puede ser utilizada en una variedad de aplicaciones médicas, incluyendo pruebas de tuberculina, administración de vacunas y otros procedimientos que requieran dosificación precisa.
Conveniencia: Viene en un paquete de múltiples unidades, lo que facilita la gestión del inventario y garantiza un suministro constante en entornos clínicos y médicos.
Calidad: Fabricada por NIPRO, una marca reconocida por su calidad y fiabilidad en la industria médica, lo que garantiza un rendimiento confiable y consistente.
Uso:
Antes de usar la jeringa, asegúrate de inspeccionarla visualmente para verificar que no tenga defectos o daños.
Seleccione la aguja adecuada para el procedimiento médico específico y acóplela firmemente a la jeringa. Aspire el líquido con cuidado, asegurándote de que la dosis sea precisa y que no haya burbujas de aire en la jeringa.
Administra el medicamento o la vacuna según las indicaciones del profesional de la salud, siguiendo las técnicas y protocolos adecuados.
Es importante seguir las prácticas de manipulación y administración de medicamentos seguras para garantizar la seguridad del paciente y la eficacia del tratamiento.