PLACAS FOTOGRAFICAS GEM
Una placa fotográfica es un soporte fotográfico constituido por una lámina de vidrio recubierta de una emulsión sensible a la luz. Las placas de vidrio fueron utilizadas como soporte antes que la película fotográfica. Se aplicaba una emulsión sensible a la luz a una placa de vidrio.
Detalles del producto
Ficha de datos
- Año
- Ca. 1900
- Altura
- 70
- Ancho
- 110
- Pais
- España - Catalunya
- Ciudad
- BARCELONA
- Editor
- Reclam's Font
- Conservación
- A
- Impresión
- Litografía
- Soporte
- Entelado
- CANVI ESTAT
- X WEB
- Autor
- -ANÓNIMO
Descripción
Una placa fotográfica (del inglés Photographic plate; y éste del francés Plaque photographique) es un soporte fotográfico constituido por una lámina de vidrio recubierta de una emulsión sensible a la luz.
Las placas de vidrio fueron utilizadas como soporte antes que la película fotográfica. Se aplicaba una emulsión sensible a la luz a una placa de vidrio. Esta forma de material fotográfico desapareció del mercado de consumo en gran medida en los primeros años del siglo XX ya que se introdujo el uso de películas que presentaban menor fragilidad y otras ventajas. Sin embargo, las placas fotográficas continuaron utilizándose por la comunidad astronómica profesional hasta la última década del siglo XX, ya que estas placas pueden quedar impresionadas con el orden del 2% de la luz recibida y ofrecen un alto grado de resolución.
Las placas de cristal ofrecían una calidad superior a las películas en algunos campos de investigación ya que eran más estables y menos propensas a doblarse o distorsionarse, especialmente en los formatos de gran tamaño para obtener imágenes de un amplio campo.
Historia
En los comienzos de la fotografía se empleaban las placas húmedas al colodión: el fotógrafo tenía que preparar sobre el terreno, es decir, distribuir correctamente la emulsión fotográfica sobre el vidrio en el momento de uso. Después los hermanos Lumière inventaron la placa seca, que fue sustituida poco a poco desde principios del siglo XX por la película, que iba acompañada siempre con un papel de base, hasta que George Eastman comercializó la película de celuloide.
Los formatos más comunes empleados en las placas eran: 24 × 30 cm, 18 × 24 cm, 13 × 18 cm, 9 × 12 cm, 6 × 9 cm y 4,5 × 6 cm.
CLASIFICACIÓN DE LOS CARTELES SEGÚN SU CONSERVACIÓN (en negrita la correspondiente a este ejemplar):
A+ Perfecto estado de conservación, muy raro encontrar un ejemplar en este estado impecable.
A Cartel en muy buen estado de conservación. Puede presentar algún desgarro inapreciable en los márgenes, no presenta ninguna falta de papel. Los colores son frescos y no se aprecian manchas.
A- Puede presentar alguna leve marca de doblez, desgarro o pequeña falta de papel en los márgenes. Si presenta restauración, está realizada con éxito.
B+ El cartel puede estar restaurado. Se aprecian levemente los defectos.
B Cartel en buen estado de conservación. Presenta desgarros, algunas manchas y algunas faltas de papel, jamás afectando al área crucial del diseño. Los colores son frescos y el cartel tiene una apariencia general muy buena.
B- El cartel está restaurado, se aprecian algunos defectos y leve pérdida de color en las marcas de doblez.
C+ Las restauraciones son visibles.
C Cartel en regular estado de conservación. Presenta desgarros, manchas, marcas de doblez y o faltas de papel que puede afectar parcialmente al área crucial del diseño, los colores pueden estar algo desvaídos y el cartel tiene una apariencia general de regular a buena.
C- Requiere restauración.